domingo, 12 de mayo de 2019

Buenos días, Gregorio

Ilustración: El Pulpo Santo


Cinco y algo de la madrugada,
mis ojos se abren pero no se abren,
mi mente se acerca y se aleja
de una gran verdad de mi vida
y de otra
como un insecto bajo la lluvia.
Recuerdo mis sueños,
me aferro a ellos,
los escribo.
Lo cierto de mi vida sigue ahí,
subsecuente,
en cada hora subsecuente,
mientras yo
sigo volando como un insecto.